El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible trabaja en un proyecto para definir una alternativa en superficie para mejorar los accesos al puerto de Gijón.
Este nuevo diseño plantea, según el Departamento, un vial en superficie siguiendo aproximadamente el mismo corredor planteado hasta ahora, que permitiría garantizar la viabilidad técnica y económica de la obra al presentar un plazo y un coste más acotados, así como una menor incertidumbre en su ejecución y operativa.
Como consecuencia, Transportes descarta el túnel de dos kilómetros porque su construcción implica una serie de riesgos e incertidumbres inasumibles sobre el futuro de las viviendas y por las limitaciones en su operativa, al no poder circular mercancías peligrosas y de dimensiones singulares. De igual modo, según el criterio del Ministerio, la solución en túnel haría inviable, para el Ayuntamiento de Gijón, desarrollar sobre el mismo un bulevar de las mismas características que el que este proyecto permite integrar.
Así mismo, la antigüedad del proyecto en un entorno en constante evolución, sumado a la complejidad técnica de la actuación que se han puesto de manifiesto en el proceso de licitación y presentación de ofertas, han llevado a reevaluar la viabilidad técnica del proyecto.
Consecuentemente, tras estudiar en profundidad los riesgos e incertidumbres a los que se enfrenta la actuación, y haber detectado nuevos condicionantes que comprometen seriamente la viabilidad técnica y económica de la obra, se ha optado por estudiar nuevas alternativas en superficie, consideradas más eficientes.
En particular, se han detectado riesgos significativos para edificaciones existentes,algunas de reciente construcción, que las pondría en riesgo por asientos, inundabilidad y posibilidad de colapso así como la incertidumbre geotécnica y condicionantes hidrogeológicos muy complejos que representan importantes y constantes riesgos en la fase de construcción y de explotación.
Transportes asegura que ese modelo hubiera condicionado desarrollos futuros del puerto y que no garantizaba la liberación del tráfico en la Avenida Príncipe de Asturias, ya que los nuevos desarrollos industriales previstos en el enclave, como el establecimiento de un centro de fabricación de estructuras para aerogeneradores o la localización en el entorno del puerto de proyectos de mercancías peligrosas, son incompatibles con una conexión soterrada, que seguirían circulando por la Avenida Príncipe de Asturias, ya que la normativa de seguridad en túneles es muy exigente.