En las últimas semanas se detecta a nivel global una mayor pujanza en la demanda de servicios de transporte marítimo que hace que la capacidad de la flota mundial se constriña.
En este mismo sentido, los desvíos de las rutas del mar Rojo al cabo de Buena Esperanza también reduce el número de barcos disponibles, dado que los viajes son más largos.
Esta circunstancia se deja notar especialmente en las rutas entre Asia y el norte de Europa, en las que, según Linerlytica, la capacidad real de la flota se ha reducido en un 5,1% durante el último año. Sin embargo, al mismo tiempo, en los servicios desde el continente asiático al Mediterráneo se registra un incremento de un 41,9% en el último ejercicio.
Así mismo, este estrechamiento del equilibrio entre oferta y demanda también impulsa la incorporación de más capacidad. Se calcula que la producción de contenedores en abril ha alcanzado los 520.000 TEUs.
Según la consultora, 1,2 millones de TEUs se han incorporado al mercado en los últimos cinco meses para abordar los desvíos por Buena Esperanza. 800.000 de esos TEUs se han destinado a tráficos con el Mediterráneo con fletes más competitivos.
En este mismo sentido, el último análisis de Linerlytica constata que el volumen de flota ociosa está durante la vigésima semana de este año en un nivel mínimo de un 0,3% con un total de 100.343 TEUs repartidos en un total de 64 buques.
A su vez, la congestión portuaria mundial parece se mantiene en un 5,3% de la flota total, con una capacidad de 1,63 millones de TEUs.
Por otro lado, la consultora estima que en los últimos treinta días se han incorporado al mercado un total de 44 portacontenedores con una capacidad total de 259.282 TEUs, mientras que, al mismo tiempo, se han retirado de la navegación siete embarcaciones con 8.695 TEUs de capacidad.
