Las tensiones laborales vuelven a amenazar la actividad en algunos de los principales puertos de la fachada este estadounidenses de cara al inminente otoño.
De momento, como informa el Wall Street Journal, se están intensificando las negociaciones para intentar alcanzar un acuerdo salarial que evitaría que 45.000 trabajadores portuarios del país fueran a la huelga a primeros de octubre.
Las navieras se muestran cada vez más preocupadas por una movilización que se producirá además en un momento clave de la campaña de las elecciones presidenciales de noviembre y que, en su caso, afectaría a enclaves principales de la costa este norteamericana como los de Nueva Jersey, Virginia o Savannah.
Precisamente en este contexto claramente electoral, las autoridades estadounidenses monitorizan la situación por si fueran necesarios servicios de mediación, algo que ya han sugerido algunos importadores y productores del país que, en todo caso, han adelantado los pedidos de cara a la temporada alta de fin de año para evitar posibles interrupciones de sus cadenas de suministro.
Mientras tanto, las posturas están muy alejadas. Los trabajadores aspiran a superar los incrementos salariales conseguidos por sus compañeros de la costa oeste de los Estados Unidos, mientras que las empresas rebajan estos aumentos a la mitad.