SFL ha cerrado esta misma semana la compra de dos graneleros por un importe total de 114 millones de dólares, algo menos de 107 millones de euros al cambio.
Las unidades están operativas y fueron construidas entre 2022 y 2023. Así mismo, las embarcaciones cuentan con un peso muerto cada una de ellas de 33.000 toneladas y están equipadas tanto con motores duales que pueden funcionar con GNL como con tanques de acero inoxidable.
SFL espera incorporar los buques entre junio y agosto de este mismo año, de tal modo que se destinarán a diferentes servicios de transporte de productos químicos durante los próximos ocho años con Stolt Tankers, filial de Stolt-Nielsen. En concreto, uno de ellos cuenta con contrato de fletamento a largo plazo, mientras que el otro se destinará a servicios de pool con otras embarcaciones de similar capacidad.
La compañía estima que esta operación le permite hacer frente a la renovación de su flota con nuevas unidades más eficientes y sostenibles, con unas condiciones financieras favorables y en un contexto de mercado marcado por el incremento de la demanda en el segmento del transporte marítimo de productos químicos.
