
Jaime Luezas, jefe del Área de Servicios a la Comunidad Portuaria en Puertos del Estado, ha participado en la II Jornada Cátedra Smart Ports en el puerto de Castellón, en la que ha abordado la importancia de pasar del dato al conocimiento para poder tomar decisiones más inteligentes basadas en evidencias, optimizar y automatizar procesos, fomentar la innovación, mejorar la experiencia cliente y captar oportunidades de negocio.
La transición, fundamental para cualquier organización del sector portuario que quiera mantener su competitividad, consiste en "transformar los datos en bruto en información significativa y comprensible y, a continuación, identificar patrones, tendencias y relaciones ocultas, emular y simular”.
“Estamos asistiendo a una revolución del conocimiento basada en los datos registrados, conectados y digitales”, ha asegurado Luezas, que ha indicado que la nueva Norma UNE 178110, que pretende facilitar la transformación de los puertos hacia el concepto de puertos inteligentes, también reafirma la necesidad de un cambio cultural “que nos lleve a pensar en dato y no en aplicativos”.
Las fases en la transformación de un puerto en puerto inteligente se resumen en digitalizar, que supone convertir la información analógica en digital; digitalización, referido a la optimización y automatización de procesos; y, finalmente, la transformación digital, que implica contar con tecnología digital en todos los componentes de la cadena de suministro, transformando la forma de abordar las operaciones y de generar valor .
El reto no reside en la conversión a formatos digitales, sino en procesar los datos y centrarse en la optimización de los procesos para obtener flujos de trabajo que ya no precisan intervención manual. Para el jefe del Área de Servicios a la Comunidad Portuaria de Puertos del Estado “la competitividad está en saber generar conocimiento a partir de esos datos combinándolos de la forma que corresponda”.
El primer paso es sensorizar, aflorar y agregar datos. A continuación, la segunda fase se centra en la coordinación operativa entre la comunidad portuaria y logística. El tercer paso consiste en la oferta integrada de servicios y, finalmente, la última etapa deriva en la sincromodalidad, el smart contract y el puerto conectado.
En Europa, los sistemas se configuran como una infraestructura para agrupar, procesar y compartir datos entre entidades y sistemas. Un buen ejemplo sería el sistema Simple, una iniciativa del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, Adif y Puertos del Estado.
En cuanto a los retos que implica el paso del dato al conocimiento, los principales giran en torno a la obtención de datos en tiempo, la confianza en los datos en origen, la seguridad, las regulaciones emergentes, la estandarización y el talento especializado.