La Mesa Ejecutiva de Cruceros del puerto de Tarragona se ha reunido recientemente para realizar el cierre oficial de la temporada 2024 y analizar las previsiones de cara a 2025. El año pasado se batieron récords de escaleras y pasajeros, con 63 escalas y un total de 136.850 pasajeros, mientras que de cara a 2025, están previstas 65 escalas, que supondrían un nuevo récord y llevarán unos 120.000 cruceristas a la zona.
En primer lugar, se ha puesto en valor el incremento del 19% en cuanto a la llegada de cruceristas en 2024, lo que demuestra el atractivo que despierta el destino. Según una encuesta de satisfacción de los cruceristas elaborada por Eurecat, el 89,2% aseguraba que el destino ha cumplido o superado las expectativas. En cuanto a la valoración de la terminal, se ha situado en un 9,1, lo que pone en evidencia el salto cualitativo que se ha conseguido con su construcción.
Otra de las conclusiones destacables es el aumento del gasto por pasajero, que se incrementó un 27,5%. Si en 2023, los cruceristas, de media, gastaban en destino 17,6 euros, en 2024, el gasto creció, situándose en 22,5 euros, lo que se traduce en un aumento del impacto económico de la actividad en el territorio. En cuanto a las actividades que realizan los visitantes una vez desembarcan, el 87% hace visitas por libre, un 10% hace excursiones al territorio y sólo un 3% contrata una excursión a Barcelona.
El trabajo también desglosa la nacionalidad de los pasajeros. Los cruceristas de nacionalidad española, italiana y francesa representan dos terceras partes del total, mientars que el tercio restante incluye principalmente a pasajeros de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y otros países.
Por otro lado, se han analizado las previsiones para esta nueva temporada, inaugurada el 2 de abril con la llegada de "La Belle des Océans". Este año, dentro de las 65 escalas programadas, se prevé que atraquen en el muelle de Baleares 32 barcos diferentes, de los que 16 lo harán por primera vez.
Por su parte, los 120.000 cruceristas que se esperan están en la línea de los últimos años. Esta estimación confirma la tendencia de crecimiento, si bien las previsiones de escalas y cruceristas aún están muy lejos de los volúmenes que alcanzan los grandes puertos de cruceros del Mediterráneo.
