La Autoridad Portuaria de Bilbao ha movido 18 millones de toneladas entre enero y junio, lo que supone un crecimiento cercano al 10%, que está por encima de la media de Puertos del Estado, con un 3%.
Los graneles líquidos han aumentado un 16% y la mercancía convencional un 11%. Por su parte, los contenedores han descendido un 5% y los graneles sólidos un 2%.
En términos generales, las mercancías que más han crecido son el gasóleo, el crudo de petróleo, los productos químicos, los productos siderúrgicos, los minerales, y el papel y la pasta. Los principales descensos se dan en el gas natural, el fueloil, los aceites y grasas, el cemento y el clínker, y las habas de soja.
Por su parte, el tráfico rodado ha aumentado un 11% y supera ya las 550.000 toneladas, mientras que los UTIs se han incrementado en un 4%. Este incremento se ha producido pese a que Brittany Ferries no ha operado en el primer trimestre por las modificaciones para adecuar la rampa ro-ro a sus nuevos buques, que como los de Finnlines, tienen mayor capacidad y son más sostenibles.
Por fachadas, la primera es la Europa Atlántica con el 43% del tráfico, seguida de América Atlántico Norte con el 16%, América Atlántico Sur con el 14% y Asia con el 13%. De los 20 principales países a los que exporta e importa, 12 son de fuera de Europa, lo que avala sus servicios y tráficos tanto para cortas distancias como para rutas transoceánicas.
Por otra parte, han escalado en las instalaciones de Ciérvana 59 ferris con destino a Reino Unido e Irlanda, con 50.680 pasajeros que suponen un crecimiento del 7%, mientras la terminal de cruceros de Getxo ha acogido 35 cruceros y 54.969 cruceristas, un 14% más. En total han llegado en barco 105.649 personas, un 10% más que hasta junio de 2023.
Inversiones
Cabe apuntar que el puerto de Bilbao se presenta como un hub logístico, industrial y energético en el que se están ejecutando o en trámite proyectos que requieren una inversión de unos 700 millones. El 78% de la inversión es privada y se destinará a plantas de combustible y áridos sintéticos, hidrógeno renovable, reciclaje, biocombustibles y componentes eólicos.
La economía circular, asimismo, pivota en torno a una gran parte de las inversiones tanto de la propia Autoridad Portuaria como de la empresa privada. A ello se une la gran oportunidad que tiene el puerto de Bilbao, para acoger corredores verdes y el corredor del hidrógeno que avala la Unión Europea.
En este sentido, los puertos de Bilbao, Ámsterdam y Duisport, junto al Ente Vasco de Energía, Petrono, SkyNRG, Evos Ámsterdam y Zenith Energy Terminals se han unido en un Memorando de Entendimiento en el ámbito del hidrógeno y su distribución por esta ruta marítima.
Por otro lado, el último proyecto aprobado por el Consejo de administración ha sido la adjudicación del contrato de las obras de la segunda fase del Espigón Central en el Abra exterior a la UTE formada por Sacyr Construcción y Construcciones Amenábar. El importe de la obra asciende a 55.148.345 euros y el plazo de ejecución es de 26 meses.
La segunda fase aportará una nueva superficie portuaria de 31,2 hectáreas y se generarán 1.011 metros lineales de nuevos muelles de atraque: 664 metros lineales en el nuevo Muelle A3 y 347 metros lineales como ampliación del actual Muelle A4.
A nivel financiero, en el primer semestre de 2024 la Autoridad Portuaria ha alcanzado una cifra de negocio de 39,2 millones, lo que representa un incremento del 16,8%. Por su parte, la deuda con el Banco Europeo de Inversiones se sitúa en 39 millones, si bien se dispone de una tesorería de 66.
El mantenimiento del equilibrio económico financiero es uno de los ejes del Plan Estratégico 2023-2026 para desarrollar el despliegue de su infraestructura y nuevos servicios en materia de transición energética, innovación y medio ambiente.