Hapag-Lloyd ha cerrado un acuerdo con la china Goldwind para garantizarse el suministro anual de 250.000 toneladas de metanol verde.
Con el uso de este combustible, la naviera germana espera ahorrar la emisión de 400.000 toneladas de CO2, ya que este metanol verde procede de una mezcla de biometanol y de e-metanol que cumple con las regulaciones internacionales y que permite una reducción de emisiones de un 70%.
Este acuerdo supone un gran paso adelante en la estrategia de Hapag-Lloyd para alcanzar las cero emisiones de carbono en sus actividades de transporte marítimo para 2040.
Una década antes, hacia 2030, la compañía espera estar en disposición de que las emisiones de su flota sean una tercera parte de las que registraba en 2022.
Los cinco portacontenedores de 10.000 TEUs de capacidad que Hapag-Lloyd y Seaspan están modificando para que usen metanol a partir de 2026 utilizarán este metanol verde.