En los últimos tres meses, la contratación de graneleros de nueva construcción ha sido un 70% inferior a la media anual. El descenso de los fletes en los últimos meses, las perspectivas poco halagüeñas y los elevados precios de los nuevos buques han contribuido a la ralentización, y es probable que la contratación en 2024 no alcance los niveles de 2023, según explican desde Bimco.
Impulsado por una demanda saludable, el mercado de graneleros se mantuvo fuerte en los tres primeros trimestres, pero en los últimos meses, el debilitamiento de la demanda china de importaciones, unido a la recuperación de los tránsitos por el Canal de Panamá, ha repercutido negativamente en los fletes.
En octubre, el Baltic Dry Index cayó un 15% intermensual y, tras una nueva caída en noviembre, el índice ha terminado un 16% por debajo del mes de noviembre del año pasado. Además, los armadores siguen enfrentándose a una importante incertidumbre en el mercado y en la normativa.
El crecimiento de la demanda de graneles sólidos podría empezar a ralentizarse en los próximos años, a medida que los envíos de carbón alcancen su punto máximo y aumente la producción de acero reciclado, lo que afectaría a los envíos de mineral de hierro. También sigue existiendo una gran incertidumbre con respecto a qué combustible alternativo debe utilizar un buque de nueva construcción y si este estará disponible en los diferentes puertos y regiones.
A su vez, desde agosto de 2024, los precios de los buques de cinco años han caído un 7% por unas condiciones de mercado más débiles, mientras que los precios de los buques de nueva construcción se han mantenido estables, por lo que la construcción de un buque resulta menos atractiva. No obstante, los precios de los activos siguen siendo elevados, ya que un granelero de segunda mano de cinco años sigue vendiéndose, por término medio, por el 90% de un buque nuevo.
Cabe apuntar que los precios de los buques nuevos se han mantenido altos debido a la gran cartera de pedidos de petroleros, portacontenedores y buques para transporte de GNL. Estos sectores ya han contratado más buques que en 2023, compitiendo por las limitadas plazas disponibles en los astilleros.
Los buques de mayor tamaño contratados ahora podrían no entregarse hasta 2028. A pesar de ello, el ‘capesize’ ha sido hasta ahora el único segmento que ha registrado una mayor contratación en 2024, con un aumento del 42% en términos de capacidad. La contratación de panamax y supramax disminuyó, aunque siguieron siendo los segmentos más contratados tanto en términos de capacidad como de número de buques.
En cualquier caso, a pesar de la baja contratación, la cartera de pedidos de graneleros corresponde al 10,4% de la flota, lo que es suficiente para asegurar la renovación en un mercado estable. Además, en los próximos años la contratación experimentará inevitablemente un repunte, ya que el sector se enfrenta a unas normas de sostenibilidad cada vez más estrictas, lo que podría incentivar el reciclaje.