
En 2024, las entregas de nuevos petroleros de crudo cayeron a su nivel más bajo en 36 años, ya que solo 17 nuevos petroleros, con una capacidad de 2,5 millones de toneladas de peso muerto, se unieron a la flota. Por tanto, en comparación con 2023, la capacidad entregada cayó un 74%, según explican desde Bimco.
Además, a lo largo del año, el reciclaje de petroleros de crudo aumentó hasta los 1,7 millones de toneladas, por lo que la flota terminó 2024 siendo sólo un 0,2% más grande que a finales de 2023, lo que supone el crecimiento más lento en 23 años.
Los segmentos Aframax y Suezmax experimentaron un crecimiento de la capacidad del 0,5% y el 1,1%, respectivamente. Sin embargo, la capacidad del segmento VLCC cayó un 0,2% al reciclarse dos buques y no entregarse ninguno nuevo.
Combinado con los bajos niveles de reciclaje durante los últimos dos años, el escaso aumento del nuevo tonelaje ha llevado la edad media de los petroleros de crudo a 12,8 años, la más alta en 26 años.
En consecuencia, el 19% de los petroleros de crudo tiene ahora 20 años o más y supone el 18% de la capacidad de los petroleros de crudo, lo que los convierte en principales candidatos para el reciclaje en los próximos años, a menos que se mantengan operando como parte de la flota paralela o fantasma.
Tras una actividad excepcionalmente baja en 2022, la contratación de nuevos buques repuntó en 2023 y 2024. Así, la relación entre la cartera de pedidos y la flota ha pasado de un 2,8% a principios de 2023 a un 10,4% a principios de 2025.
De momento, la cartera de pedidos se extiende hasta 2028 y podría añadir una media del 2,5% de capacidad anual a la flota durante los próximos cuatro años. Así, dado que el crecimiento de la demanda mundial de petróleo se está ralentizando, el crecimiento de la flota debería poder equipararse al de la demanda, incluso si se acelera el reciclaje.
De este modo, no solamente se reduciría la edad media de la flota de petroleros de crudo, sino que la renovación también contribuiría a su descarbonización. En la actualidad, sólo el 3,6% de los petroleros de crudo puede utilizar combustibles alternativos, mientras que el 2,7% está preparado para un posterior reequipamiento.
En cuanto a la cartera de pedidos, el 18% de los buques que se entreguen podrán utilizar combustibles alternativos, mientras que el 29% estarán preparados para una adaptación.