La última actualización que ha realizado la Unctad en relación con su valoración de la evolución del comercio mundial, apunta que este segmento terminará el ejercicio 2024 con un volumen de en torno a los 31,36 billones de euros y un crecimiento anual de un 3,3%.
En particular, el organismo internacional señala que el comercio internacional de servicios crecerá un 7% este año, mientras que los intercambios mundiales de mercancías ascenderán un 2% para colocarse por debajo del pico alcanzado en 2022.
Sin embargo, pese al relativamente optimista escenario que dibuja la Unctad para el comercio global este 2024, de cara a 2025 sus previsiones son algo más sombrías, debido principalmente a los riesgos que presentan los cambios geopolíticos que tendrán lugar el año que viene, especialmente la llegada de la nueva Administración Trump al Gobierno de los Estados Unidos, que a buen seguro desarrollará una agresiva política arancelaria.
Con este panorama podría recrudecerse la sorda guerra comercial que mantienen desde hace tiempo los Estados Unidos y China, de tal manera que el país asiático podría responder a estos nuevos aranceles realizando ajustes en las cadenas de suministro globales, aprovechando el papel protagonista que se ha ido ganando en el abastecimiento de algunas de las materias primas críticas para la producción de algunos de los productos más usados, principalmente electrónica.