Armas Trasmediterránea ha empezado a utilizar esta misma semana la infraestructura de suministro de energía eléctrica a ferries de líneas regulares instalada en los puntos de atraque del puerto de Tenerife.
Este servicio permite a la naviera, durante sus escalas nocturnas, apagar los motores auxiliares de sus buques rápidos, contribuyendo significativamente a la reducción de las emisiones de dióxido de carbono y ruido.
En este sentido, la conexión a la red eléctrica terrestre proporcionada por la Autoridad Portuaria permite que los motores auxiliares de los buques, utilizados para sistemas de refrigeración, iluminación y equipos de emergencia, permanezcan apagados durante todo el tiempo que están atracados, en este caso de diez de la noche a seis de la mañana, disminuyendo notablemente los ruidos en la zona y mejorando la calidad del aire.
La Autoridad Portuaria de Tenerife estima que para 2027 podría tener desplegadas conexiones eléctricas en todos los puertos que gestiona. De manera particular, la Autoridad Portuaria ha empezado a trabajar con las conexiones de los cruceros y con terminales de carga, con el fin de obtener una sensible reducción de la huella de carbono.
Por otra parte, la conexión al puerto de Santa Cruz de Tenerife durante las escalas nocturnas de los fastferry de Armas Trasmediterránea se alinea con la estrategia de sostenibilidad de la compañía.
Con al sistema de ‘cold ironing’, los motores diésel de sus buques pueden apagarse y conectarse al suministro eléctrico terrestre, que implica una reducción de la contaminación acústica y de emisiones de CO2 en la zona. En esta misma línea, la naviera utiliza biocombustibles producidos a partir de residuos agrícolas, para conseguir una mayor reducción de dichas emisiones y promover la economía circular.