La asamblea de la International Longshoremen’s Association, sindicato estadounidense de estibadores y trabajadores portuarios, ha ratificado esta semana el acuerdo laboral alcanzado con la United States Maritime Alliance sobre las condiciones laborales en los puertos de la costa este de los Estados Unidos para los próximos seis años.
Se cierra así un conflicto que amenazó con una huelga a finales del año pasado y que hubiera tenido un duro impacto sobre las cadenas de suministro del país y de todo el mundo.
Así mismo, el pacto garantiza la paz social en los puertos de la fachada este norteamericana hasta el 30 de septiembre de 2030.
El acuerdo contempla un aumento salarial de un 62, protección de los trabajadores frente a la automatización de las terminales portuarias, mejoras en la atención sanitaria para las plantillas, así como en sus vacaciones y festivos.
El sindicato International Longshoremen’s Association y la patronal United States Maritime Alliance han anunciado, de igual modo, que la firma oficial de este compromiso se celebrará el próximo 11 de marzo.
