La Autoridad Portuaria de Ferrol- San Cibrao ha completado un nuevo hito en las obras del acceso ferroviario al Puerto Exterior de Ferrol, pues las cimentaciones para la construcción del viaducto han entrado en la recta final.
En total, se está actuando en los 17 apoyos del viaducto, trabajando tanto en tierra como en mar. Las previsiones apuntan a que las cimentaciones en tierra estarán finalizadas en febrero y a finales de marzo o principios de abril, se terminarán también las de mar.
A partir de ahí, se continuará con los alzados de las pilas y en los próximos meses, probablemente a lo largo del verano, comenzará la colocación del tablero.
El presidente del puerto, Francisco Barea, ha visitado esta mañana los trabajos que se ejecutan en el puerto interior, acompañado por el director de la entidad portuaria, Jesús Casás, el delegado de Copasa, Ramón Fernández, y la directora de obra, Marina Soler.
El viaducto, que unirá el puerto interior con la boca del túnel de A Graña, tendrá un total de 607 metros de longitud. Consta de un primer tramo de 210 metros en tierra en el puerto interior, con 12 pilas, y un segundo tramo de 397 metros sobre la ensenada de A Malata hasta el estribo situado en A Graña.
El viaducto se soportará sobre 17 pilas, denominadas pilas-pilote, de las que 13 están en tierra y cuatro en el agua ejecutadas con medios marítimos. Los pilotes sobre los que se apoya tienen diámetros de entre 1,2 y 2 metros. Además, contará con un vano central de 63 metros.
Además de la ejecución de las obras del viaducto, se continúa trabajando de forma paralela en el revestimiento interior del túnel de casi seis kilómetros que comunica A Graña con el puerto exterior. El objetivo es que las obras del acceso ferroviario estén terminadas a finales de este año y que el tren esté operativo a lo largo de 2025.
La llegada del ferrocarril beneficiará a todos los tráficos, pero especialmente a la mercancía contenerizada y atraerá a nuevas empresas y ayudará a la generación de nuevos tráficos indirectos.