El último Intelligence Briefing de la Iru da cuenta de la importancia crucial que tiene el transporte de mercancías por carretera para el buen funcionamiento de las cadenas de suministro en la Unión Europea.
Según este documento, los volúmenes de mercancías movidas por carretera en la Unión Europea han crecido un 22% entre 2013 y 2022, con una tendencia al alza sostenida a lo largo de toda esa década, salvo durante el lapso que supuso 2020 a causa de la pandemia de la covid.
Así pues, el transporte de carga en camión alcanza el 77% de todo el volumen de mercancías que se transporta en la Unión.
De igual modo, en el período que va de 2013 a 2022 se han producido cambios de gran calado en la estructura del mercado europeo de transporte de mercancías. En concreto, en esta década, Polonia ha desplazado a Alemania como el país de la Unión con un mayor tráfico de mercancías por carretera. España se mantiene entre los principales países para este sector de actividad, aunque con un volumen a la baja en los útlimos años.
Por otro lado, Lituania es el país que presenta un mayor volumen de transporte de mercancías por carretera per cápita de toda la Unión. Así mismo también están en cabeza pequeños países como Eslovenia y Letonia.
Así mismo, el transporte de mercancías por carretera en la Unión es un sector centrado esencialmente en servicios nacionles, aunque en los casos de algunos países con un gran potencial exportador, como Lituania, Luxemburgo o Eslovenia, es el transporte internacional el segmento principal.
A su vez, los tráficos internacionales se concentran en servicios de exportación, con las importaciones perdiendo cuota en detrimento de servicios cruzados y de cabotaje.
Por tipo de mercancías, el transporte europeo mueve principalmente materias primas, bienes intermedios, así como productos agrícolas y alimentarios.
