La depresión aislada en niveles altos que está afectando al centro y el sureste de la península ibérica esta semana se ha cebado en la Comunidad Valenciana y en las provincias de Albacete y Almería, donde ha dejado serios daños humanos y materiales.
Lo más importante de todo: este temporal deja, según cifras oficiales de la mañana de este miércoles, 30 de octubre, 51 personas fallecidas y un número indeterminado de desaparecidos a los que buscan intensamente personal de la Generalitat Valenciana y de la Unidad Militar de Emergencias, desplegada en la zona desde ayer, 29, con más de mil profesionales.
De igual modo, la dana también ha provocado graves daños en diversas poblaciones de la provincia de Valencia, especialmete de su área interior, como Utiel y Requena, y ha afectado a algunas de las principales infraestructuras de la zona.
En el ámbito viario, este 30 de octubre permanecen cerradas importantes carreteras como la A-3, la A-7, la V-30, la V-31 y más de otras setenta vías autonómicas.
Así mismo, la Autoridad Portuaria de Valencia ha informado de que las terminales de contenedores del puerto no tendrán actividad al menos hasta las dos de la tarde de este miércoles, 30 de octubre.
A au vez, el puesto de control fronterizo de la rada valenciana tendrá actividad limitada a la posibilidad de llegada del personal inspector y operador a la instalación.
De igual modo, los accesos al recinto por la V-30 estarán sujetos a restricciones por las indicaciones de las autoridades de tráfico, aunque ahora tienen prohibida la salida. Así mismo, los depósitos de contenedores del enclave portuario tendrán actividad limitada, debido a la dificultad del personal de transitar por las carreteras.
Por otra parte, las inundaciones han anegado polígonos industriales y zonas logísticas. Mercadona, por ejemplo, ha dejado de operar en su principal plataforma logística de Valencia. En ese mismo polígono también tiene instalaciones logísticas Carrefour. En Ribarroja, un número indeterminado de trabajadores han tenido que hacer noche en sus centros de trabajo al no poder abandonarlos por las inundaciones. Además, la planta de Ford en Almusafes ha dejado de operar.
Así mismo, centenares de camiones permanecen varados en áreas de servicio y zonas logísticas de la provincia al no poder circular.
Renfe ha suspendido al menos cinco líneas de Cercanías en la capital valenciana y los tráficos de alta velocidad. Adif informa de que la circulación por el Corredor Mediterráneo se mantiene suspendida, de manera que los trenes entre València y Barcelona siguen, de momento, sin operar.
Aún no se ha realizado recuento de daños, dado que la prioridad es recuperar la normalidad y acceder a todas las zonas afectadas.
