Durante el primer trimestre del año se han consumido en España un total de 3.315.153 toneladas de cemento, 366.902 menos que en el mismo período de 2023, lo que implica una caída anual de un 10%, según los últimos registros estadísticos de Oficemen.
La patronal estima que este ajuste en negativo del cómputo trimestral viene marcado por la caída de un 23,6% experimentada en marzo, mes en el que el consumo de cemento ha sido de 1.101.570 toneladas, 339.869 menos que hace un año.
Este retroceso del tercer mes del ejercicio es achacable al efecto estadístico que tiene la reducción de días laborales por la celebración de la Semana Santa y al mayor número de días de lluvia, en los que se reduce el consumo de esta materia prima para la construcción.
A su vez, en el último año móvil el descenso en el consumo de cemento ha sido de un 6,4%, con un consumo total en volumen absoluto de 14.133.701 t, casi un millón de toneladas menos que en el mismo período anterior.
Estos datos reflejan una tendencia en negativo, con diez meses en retroceso y con perspectivas de tímida recuperación a lo largo del segundo semestre, siempre y cuando la coyuntura internacional y local se mantenga estable.
Por otra parte, las exportaciones retroceden un 25,1% en el primer trimestre, con una caída en marzo de un 32,4%, mientras que el acumulado de año móvil también presenta un descenso de un 14%, con un total de 4.870.231 toneladas de cemento exportadas.