La Xunta de Galicia ha abierto en este mes de agosto el plazo de solicitudes para las ayudas para la renovación de las flotas de las empresas gallegas de transporte. El importe subvencioonado es el 40% del precio de adquisición de camiones, furgonetas y sus remolques, sea cual sea su sistema de propulsión, siempre que la inversión realizada supere los 40.000 euros.
De este modo el gobierno autonómico contribuye al rejuvenecimiento de la actual flota de transporte que ha experimentado un importante envejecimiento en los últimos años, duplicándola en la última década. Actualmente la media nacional en los camiones rígidos se sitúa en 14,8 años, frente a tan sólo 5,9 en 2007 y en las cabezas tractoras en 8,1 años, frente a sólo 4,7 en 2007. En el caso de la Comunidad Autónoma de Galicia los datos son algo peores, con una edad media de los camiones rígidos de 16,5 años y de 8.8 años en las cabezas tractoras.
Desde Fenadismer se insiste una vez más en la necesidad de que el Ministerio de Transportes incluya en la Ley de Presupuestos de 2025 un Plan Renove a nivel estatal que contemple también la compra de vehículos diésel, incluidos los diésel de última generación y no sólo eléctricos o de hidrógeno, ante el preocupante envejecimiento de la flota actual española.
En el último plan de ayudas, dos de cada tres operaciones fueron para compra de autobuses, pese a que la flota española de camiones en España es seis veces superior.
El último plan de ayudas, que estuvo vigente hasta el pasado mes de abril, no obtuvo el resultado esperado, ya que la mayor parte de las solicitudes presentadas por los transportistas fueron destinadas al achatarramiento de vehículos, como consecuencia de que la línea de ayudas para la renovación de flota sólo contemplaba la adquisición de vehículos eléctricos o de hidrógeno. Tan sólo las empresas de transporte de viajeros, se acogieron a estas ayudas para la compra de unidades destinadas principalmente al transporte urbano.
De hecho del total del presupuesto para esta línea, según los datos facilitados por el Ministerio de Transportes dos de cada tres ayudas fueron destinadas a la adquisición de autobuses, pese a que la flota española de camiones en España es seis veces superior.