La reciente dana, que ha afectado especialmente a Valencia, Castilla-La Mancha y Andalucía, ha provocado graves perjuicios tanto a instalaciones, vehículos y mercancías como al propio personal de transporte, afectando a las empresas de las zonas más castigadas, pero también a las que estaban prestando servicio allí, así como a conductores y vehículos que se encontraban en tránsito.
Es por ello que la Confederación Española de Transporte de Mercancías se ha dirigido desde el inicio al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible para reclamar una respuesta firme y adecuada que permita paliar los daños sufridos por las empresas y autónomos del transporte de mercancías por carretera.
Aunque el Gobierno ya ha anunciado un paquete de ayuda dirigidas a los residentes de las zonas afectadas, la CETM considera que son insuficientes para mitigar las pérdidas económicas del sector del transporte, ya que no benefician a las empresas y autónomos que no están domiciliados en los municipios incluidos en el anexo del Real Decreto-ley 6/2024.
Entre los principales perjuicios, destacan los daños a vehículos, pues muchos transportistas han visto sus vehículos dañados sin recibir indemnizaciones que cubran su valor operativo, lo que afecta a sus recursos y capacidad de servicio. Al mismo tiempo, la paralización de las rutas ha provocado un lucro cesante significativo para los transportistas que se han visto imposibilitados de llevar a cabo sus servicios.
Del mismo modo, los desvíos necesarios por los cortes de vías y las restricciones al tráfico han supuesto un incremento de los costes operativos para los transportistas por el kilometraje adicional.
En consecuencia, está trabajando en una evaluación rigurosa de todos estos daños mediante el intercambio de información con sus asociados y se la presentará al Ministerio para conseguir que se destinen nuevas medidas de apoyo a cubrir las pérdidas del transporte.