Austria ha puesto en marcha una nueva restricción al tráfico de camiones en la autopista Tauern, una de las principales rutas internacionales que cruzan el país centroeuropeo.
En particular, esta nueva limitación se ha ampliado de tal modo que está operativa los viernes por la tarde y los fines de semana, y tiene su razón de ser en el incremento del tráfico que se registra en la vía por la masiva afluencia de turistas que acuden a las instalaciones de deportes invernales en el Tirol.
Las principales asociaciones alemanas de transporte de mercancías por carretera estiman, además, que esta medida es discriminatoria, ya que los vehículos destinados a Austria o al tráfico interior del país están exentos de cumplir esta restricción concreta, lo que implica un beneficio para los vehículos austriacos.
De igual manera, la medida afecta a los tiempos de tránsito en las rutas que cruzan Austria para enlazar Alemania, Italia y Eslovenia, obligando a muchos conductores a hacer sus descansos en la cabina, en contra de las disposiciones del Paquete de Movilidad.
La Iru ha criticado duramente la "frivolidad" de esta restricción de tráfico, que, según su criterio, no solo supone un atentado contra la libertad de movimiento de mercancías en la Unión, sino que desprecia las condiciones laborales de un numeroso grupo de conductores profesionales afectados, al tiempo que perjudica a las empresas de transporte no austríacas.