La nueva Transit Connect cuenta con capacidad de carga mejorada, una autonomía eléctrica de hasta 110 kilómetros y dos opciones de motor turbodiésel EcoBlue de 2.0 litros.
El operador adaptará 33 vehículos propulsados por diésel a la tecnología eléctrica o híbrida para intentar ofrecer servicios de entrega más sostenibles.
Es probable que muchos operadores acaben decantándose por la tecnología de baterías, ya que se está trabajando en sistemas más flexibles que puedan integrarse con otros combustibles e infraestructuras futuras.
Estos vehículos combinan las bajas emisiones de los vehículos eléctricos con un depósito de gasolina que puede utilizarse para complementar la autonomía que requieren los servicios de reparto urbano.