A pesar de que ciertas zonas de Estados Unidos dependen al 100% de Canadá para sus importaciones, Donal Trump ha aplicado un arancel del 10% a las importaciones de petróleo procedentes de Canadá.
El impacto de la incertidumbre existente por la política de Trump está siendo muy significativo, una situación que se suma a los posibles cambios en la economía mundial, el comercio mundial y la demanda de petróleo.
El 19% de los petroleros de crudo tiene ahora 20 años o más y supone el 18% de la capacidad de los petroleros de crudo, lo que los convierte en principales candidatos para el reciclaje en los próximos años.
En 2023 y 2024, se han encargado 551 buques nuevos con una capacidad de 38,7 millones de toneladas de peso muerto, una cifra significativamente superior a la media anual de 122 buques y 7,3 millones de toneladas de los 10 años anteriores.
A lo largo de 2025, la proporción de buques que evitan el Mar Rojo y el Canal de Suez se mantendrá al mismo nivel que en 2024, pero si volvieran a las rutas habituales, ambos mercados podrían empezar a debilitarse.
La flota de petroleros de crudo crecerá un 0,5% durante 2024 y un 1,2% durante 2025, mientras que el crecimiento de la flota de petroleros de productos será del 1,6% y el 4,8% durante 2024 y 2025, respectivamente.
Como los petroleros navegan cada vez más a través del Cabo de Buena Esperanza debido a los ataques en el Mar Rojo, la demanda en toneladas-milla ha crecido un 12% interanual, que llega a un 13% en el caso de los petroleros limpios.
En febrero el volumen de crudo a flote aumentó en 85 millones de barriles, y a final de mes alcanzó los 1.900 Mb, principalmente a causa de los desvíos de petroleros por el cabo de Buena Esperanza.