Desde la Federación Española de Distribuidores de Gases Licuados del Petróleo, se ha intentado en múltiples ocasiones negociar una revisión de las tarifas que permita a los distribuidores cubrir sus principales costes operativos.
La Federación presentará una nueva macrodemanda contra la mayoría de petroleras que operan en España por elevar artificialmente los precios finales de los carburantes.
En la nueva demanda, se ampliará la reclamación contra más compañías, al haber detectado que "siguen la política concertada de precios que marcan las infractoras".
Frente a la rebaja de cinco céntimos solicitada por el Gobierno, las tres principales petroleras, Repsol, Cepsa y BP, inician una guerra de precios con descuentos que llegan hasta los 14 céntimos por litro.
Una prueba palpable de estas "prácticas abusivas" se sufrió durante los primeros meses de la pandemia, cuando la "espectacular" bajada del precio del petróleo apenas se trasladó a los precios de los carburantes.
Fenadismer calcula que los posibles sobreprecios en el diésel han supuesto más de 15.000 euros por camión y utilizará el dato para actuar contra lo que llaman 'Cártel de las Petroleras'.
Fenadismer cree que las petroleras han llevado a cabo una "actuación continuada, durante más de una década, de alteración de los precios finales de los carburantes".
La reducción del precio medio de venta en las estaciones de servicio pertenecientes a las red de las grandes petroleras ha sido inferior al 13% en relación a los precios que había en diciembre.