La empresa ha adquirido dos nuevas instalaciones, a los que someterá a remodelación, en ubicaciones cercanas al puerto de Valencia y la terminal de carga del aeropuerto de Manises.
A nivel europeo, unos 100.000 vehículos cada noche tienen que parar en sitios no acondicionados, de los que apenas el 3% cuenta con medidas certificadas de seguridad.