La cooperativa valenciana ha invertido 50 millones en la ampliación en más de 19.000 metros cuadrados y la automatización de esta plataforma, un proceso en el que ha colaborado Miebach Consulting.
A pesar del revuelo y la difusión de la transformación digital, la adopción de la digitalización y la IA en la gestión de la cadena de suministro por parte del sector químico sigue siendo limitada.
La trayectoria de Farrés en Miebach se inició en el año 2013, cuando se incorporó a la oficina de Barcelona como consultor y responsable de Desarrollo de Negocio.
Los resultados de este estudio subrayan la importancia de la tecnología, la experiencia humana y las prácticas sostenibles para crear cadenas de suministro resilientes, eficientes y adaptables.
El sector farmacéutico está poniendo todo su esfuerzo en la mejora de la resiliencia de la cadena de suministro a través de la optimización de la logística 'inbound', la reestructuración organizativa y el aprovechamiento de herramientas digitales.
Miebach estima que los cambios que han vivido las cadenas de suministro en los últimos años obligan a adaptar los procesos de externalización logística a una operativa sometida a fuertes incertidumbres.
La consultora ha probado cuatro soluciones de exoesqueletos con el objetivo de mejorar las condiciones laborales de los operarios y aumentar la eficiencia de la operación.
El establecimiento de Miebach en España en 1982, la primera oficina abierta fuera de Alemania, supuso además el trampolín para la expansión del grupo hacia Sudamérica.
Se trata de un reto importante para las empresas, ya que las responsabilidades contempladas van más allá de la propia actividad e incluyen a todos los proveedores de productos y servicios.