La decisión se suma a la de Maersk, que en mayo comunicó que dejaría de operar en el país asiático, para cuyas autoridades esto se ha convertido en una auténtica guerra comercial.
Se encargarán, a partir de 2018, de la construcción de al menos 10 petroleros, seis graneleros 'handysize' y seis portacontenedores con capacidad para 14.500 TEUs.