Desde la primera lectura de un código de barras en los Estados Unidos en junio de 1974 se ha operado una revolución tecnológica en los procesos de compra y las operaciones logísticas de las empresas de todo el mundo.
La trazabilidad, el origen o el estado de un envío son elementos que todos damos por hecho en la actualidad, capaces de agilizar sobremanera cualquier actividad de nuestro trabajo, un camino que comenzó a allanarse con la llegada del código de barras.
Amazon trabaja para eliminar los códigos de barras en sus procesos logísticos a través de un sistema inteligente que identifica las referencias por su apariencia y tamaño.
La marca ya tiene en el mercado un nuevo dispositivo diseñado para mejorar el escaneado de productos, especialmente en actividades relacionadas con las devoluciones de producto o con el control de calidad, así como para el manejo de materiales y productos delicados.
Un estudio de Zebra vaticina que la logística va a tener que utilizar todo el potencial de las nuevas tecnologías para hacer frente al reto de las entregas ultrarrápidas y masivas con eficacia y rentabilidad.