Las ventajas de este sistema se resumen en un ahorro estimado de 3.500 euros vehículo/año en combustible, una reducción de entre el 10 y el 15% de los kilómetros recorridos y una notable disminución de las emisiones a la atmósfera.
Se trata de una experiencia piloto, que han puesto en marcha en Consum, para evaluar las ventajas ecológicas y también económicas en el uso de vehículos eléctricos para la distribución urbana o de última milla.