El valor estimado de los contratos firmados entre los meses de enero y septiembre ha ascendido a 155.000 millones de dólares, un 127% más que la media de los últimos 10 años.
La cartera de pedidos es limitada y los encargos de buques de nueva construcción se verán frenados por la incertidumbre sobre los combustibles del futuro.
Diferentes circunstancias económicas y políticas han obligado a los analistas a rebajar sus previsiones de crecimiento para el 2019, aunque aún se sitúa entre el 3% y el 3,5%.