El actual responsable de la naviera, Antonio Grávalos, tiene prevista su jubilación a final de 2012 y por este motivo, Transmediterránea ha buscado a un sustituto. Aguilera, que se incorporó en agosto de 2008 al grupo Pullmantur, compartirá espacio y trabajo con Grávalos hasta el término de este ejercicio, asumiendo hasta final de año el cargo de vicepresidente ejecutivo.
El momento actual es difícil en cuanto a resultados. La división de Servicios Logísticos y Transporte, en la que se inscribe la naviera, ha visto cómo su actividad caía un 8,1%, hasta los 714 millones de euros.
En estos últimos cuatro años, Grávalos desde su acceso al cargo como director general en 2008, ha estado al frente de la naviera y ha pilotado su reestructuración. En la nueva etapa de cohabitación que se avecina, Ignacio Aguilar tendrá que acostumbrarse a su nuevo entorno para coger el relevo de una empresa cuyos resultados se han resentido en el último ejercicio.