Manuel Pérezcarro, secretario general de FROET

Competitividad a costa de otros

Los transportistas estamos dispuestos a darles una clase de competitividad sin necesidad de meter la mano en el bolsillo ajeno.
02/09/2015 a las 7:05 h

Leche Pascual opta por las 44 toneladas Camión de Leche Pascual de 44 toneladas.

Catorce organizaciones de CEOE han firmado una especie de manifiesto para que se apruebe de inmediato el aumento de la capacidad de carga de los camiones, pasando ésta de las 40 toneladas actuales a 44 de masa máxima autorizada y todo ello en base a la necesaria competitividad de las empresas españolas que verían reducidos sus costes logísticos.

El manifiesto no es más que un panfleto propagandístico cargado de verborrea para tratar de demostrar lo estupendo de la medida.

Los hilos, como siempre, los ha movido Aecoc, la asociación que agrupa a las empresas de la gran distribución comercial al frente de la cual sigue estando Mercadona. Se nota. Porque de las 14 asociaciones firmantes, la inmensa mayoría de sus empresas pertenecen también Aecoc y, además, dos de las organizaciones firmantes las preside la misma persona, me refiero a CEIM y a UNO, ésta última defensora también junto a Aecoc de la modificación de pesos y dimensiones.

Total, son los mismos perros pero con distintos collares que, como han visto que solos no tenían fuerza suficiente para presionar a la Administración, han echado mano de otras siglas con el fin de que parezcan más, que son más representativos.

Estoy seguro de que el próximo panfleto lo pueden firmar muchos más. Es muy fácil de conseguir. Vamos a ver, si te dicen que sin poner un duro puedes ahorrarte una pasta en los costes de tu empresa, quién no lo va a firmar. Expuesto así es de tontos no hacerlo.

A continuación podríamos pedir todas las empresas que para ser más competitivos nos rebajaran la factura de la electricidad, del agua, del gas, los alquileres, los intereses bancarios, los seguros, el gasoil, y un largo etcétera.

Pues bien ¿cómo se les quedaría el cuerpo a las eléctricas, a las compañías suministradoras de agua y gas, a los propietarios de inmuebles, a los bancos, a las compañías de seguros o a las petroleras?

Pues eso es, ni más ni menos, lo que pretenden hacer estos tipos con el transporte. Que nosotros pongamos el dinero y los medios para que sus empresas puedan ser más competitivas. Hay que tener cara.

Al parecer ahora, todos quieren sacar tajada del transporte, no nos olvidemos tampoco de los concesionarios de autopistas, que pretenden que el Estado nos fría con un impuesto más para que ellos puedan rentabilizar sus concesiones.

Es vergonzoso. Tampoco es manco que estas actitudes estén amparadas por la CEOE, a la que pertenecemos y en la que estamos representados.

Del panfletillo publicado, se deduce que tampoco tienen claras las cosas. En él se refleja el siguiente párrafo “En este momento, España es una isla castigada sin esta medida de competitividad que aumenta el coste de nuestras exportaciones con un mayor coste del transporte”.

Estos caballeros al parecer, no se han enterado de que en tránsitos internacionales no se puede circular con más de 40 toneladas, así pues ¿saben de qué están hablando o simplemente quieren confundir a la opinión pública?

Hay muchas formas de ganar en competitividad. El transporte es especialista en eso, porque sus principales costes, el combustible, los salarios y cargas sociales son prácticamente inamovibles y, sin embargo, somos capaces de salir adelante en un mercado con una enorme competencia.

Cuando quieran estas asociaciones, los transportistas estamos dispuestos a darles una clase de competitividad sin necesidad de meter la mano en el bolsillo ajeno. ¿Se han enterado? Pues eso.

Manuel Pérezcarro Martín

Secretario general de Froet

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