La planta de Volkswagen en Navarra ha vuelto a superar por tercer año consecutivoel nivel del 50% de automóviles distribuidos por ferrocarril, respecto del total de la producción en la planta navarra.
De este modo, la instalación confirma la tendencia hacia el objetivo de cero impacto ambientalfijado para 2050 en todas las fábricas de la marca alemana.
Según las cifras de la factoría, el pasado 2022 se alcanzó un 54,1% de vehículos transportados por tren, cifra similar a la alcanzada en 2021. En cifras absolutas, el total de coches transportados desde la fábrica de Landaben durante el pasado ejercicio ha sido de 288.469 unidades. De ellos, 156.049 vehículos fueron distribuidos por tren y 132.420 por carretera.
Con más detalle, la mayoría de los coches trasladados por vía ferroviaria tuvieron como destino el puerto de Barcelona, al que se llevaron un total de 64.004 vehículos, un 41%% del total de unidades trasladadas por este medio.
Así mismo, al recinto portuario de Santander se distribuyeron 62.947 unidades, un 40,3% de la cifra global.
Para el fabricante germano, las dificultades por las que ha atravesado el transporte de mercancías por carretera han provocado un desplazamiento de parte de esa demanda al ferrocarril, con lo que se ha generado un cuello de botella en la disponibilidad de maquinistas y locomotoras, que unidos a la realización de obras en las infraestructuras de algunos de los corredores más transitados, y con la influencia de la escasez de componentes para la fabricación de los coches, han dificultado en gran medida la fiabilidad y flexibilidad que el transporte de vehículos en estos momentos demanda.
De cara a este 2023, se estima que continuará la inestabilidad en los suministros de semiconductores, por lo que los fabricantes de vehículos dispondrán de plazos muy cortos para anular, retrasar u organizar trenes, con esperadas alteraciones sobre las planificaciones previstas, por lo que se requiere de mayor flexibilidad.
