La Organización Empresarial de Logística y Transporte de España, UNO, ha celebrado una jornada sobre los desafíos europeos y para convertir España en hub logístico mundial, en la que se ha analizado el nivel de competitividad de la carga aérea en España y las ventajas del país para posicionarse como nodo logístico intercontinental.
Durante el acto de inauguración, el presidente de UNO, Francisco Aranda, ha aludido al descenso del 8% en el tráfico aéreo de mercancías a nivel mundial durante 2022, y al crecimiento de apenas un 0,2% registrado en España, “unas cifras poco alentadoras que nos recuerdan que queda mucho trabajo por hacer”.
Por ello, se pretende impulsar el posicionamiento del país como puerta de entrada de las mercancías de Latinoamérica que quieren entrar en Europa, y, para ello, se debe aprovechar la relación histórica con ese continente.
Según el presidente, España puede convertirse en "el gran punto de consolidación de las mercancías procedentes de los grandes 'marketplaces' asiáticos que se dirigen a Latinoamérica y que encuentran en Holanda, Bélgica, Francia o Alemania grandes alternativas”.
En palabras de Aranda, “es necesario hacer una apuesta real por la digitalización, eje sobre el que pivotará el transporte aéreo de mercancías en el futuro”, desarrollando en España plataformas digitales que permitan alcanzar los niveles de interoperabilidad necesarios para agilizar los procesos y garantizar la máxima eficiencia.
Además, el Gobierno debe diseñar un plan de Estado destinado a revisar la normativa y procedimientos paraduaneros actuales: “España necesita contar con servicios paraduaneros propios del siglo XXI; si no queremos perder inversiones y, consecuentemente, competitividad, es fundamental poner el foco en este punto ciego”.
El presidente de UNO ha identificado la mejora de las infraestructuras y centros de carga aéreade los aeropuertos como otra de las asignaturas pendientes. En esta línea, ha insistido en la necesidad de impulsar la ampliación del aeropuerto de Barcelona y revitalizar el centro de carga aérea del aeropuerto Madrid-Barajas.
Ha concluido pidiendo "la cooperación entre operadores logísticos, empresas de transporte, de handling, aerolíneas, administraciones públicas, aduanas, etc”, e insistiendo en la necesidad de “un diálogo público-privado real”.
Por su parte, la subdirectora general de Transporte Aéreo de la dirección general de Aviación Civil, Verónica Elvira, ha indicado que la carga aérea puede verse afectada por la situación económica mundial actual, pero el acumulado de enero y febrero apunta a que en 2023 se podrían alcanzar o superar los niveles pre-pandemia.