La incertidumbre económica parece estar castigando especialmentea los autónomos del país, a tenor de los datos ofrecidos en el último Barómetro de Situación de Ata, referido a junio de 2023.
Según este trabajo, el incremento de gastos está castigando a los trabajadores por cuenta de tal modo que, aunque están facturando más, un 65% de todos ellos percibe que sus gastos han crecido casi un 20% desde el año pasado, con la inflación, los impuestos, las cotizaciones y el coste de las materias primas como los factores que más les está afectando.
De acuerdo con el análisis de la organización, estos gastos están poniendo en serio riesgo la continuidadde muchos autónomos, al ver aumentar sus gastos por encima de sus ventas. De hecho, casi el 40% de los autónomos ha registrado un descenso de su facturación respecto a 2022.
En este contexto, los autónomos españoles no perciben mejoría en la evolución de su actividad y un 75% está igual o peor que hace un año. Por contra, solo uno de cada cinco autónomos asegura que su actividad ha crecido en relación a 2022.
Así pues, un 26,5% de los trabajadores por cuenta propia del país defiende que su facturación se ha mantenido similar a la del primer semestre de 2022 y un 38,9% considera que su facturación en 2023 ha caído con relación a 2022.
Como consecuencia, un 67% de los autónomos españoles afirma haber tenido que subir los precios dada la insostenibilidad de la situación, mientras que un 29,1% afirma haber asumido la subida de los gastos y ha mantenido los precios.
De cara a los próximos meses, un 60,4% de los trabajadores por cuenta propia en el país afirma que si todo sigue como hasta ahora se van a ver obligados a subirlos, mientras que un 21,9% espera no tener que hacerlo y el 17,8% restante se muestra dudoso de lo que hará con los precios a corto plazo.