La compañía Iberia prevé volver a beneficios en 2014, tras seis años de pérdidas, y elevar su margen operativo antes de alquiler de flota desde el 3% actual a una horquilla de entre el 10% y el 14% durante el periodo 2017-2020.
Iberia, integrada en IAG junto Bristish Airways (BA) y Vueling, ha presentado este pasado viernes, en su día del inversor, los objetivos estratégicos de su plan de futuro, que gira en torno a cinco ejes y contempla 30 iniciativas.
Dicho plan incidirá en lograr una sólida base de ingresos, dotar a la compañía una mayor flexibilidad y de unos costes más competitivos y en trabajar en otras vías de ingresos complementarios que sean rentables.
La aerolínea española espera generar con este plan de nuevo caja hasta situarla entre 200 y 300 millones de euros anuales durante este periodo, en el que aumentará un 6,5% su oferta anualmente.
Iberia ha anunciado la apertura de 13 nuevas rutas en Europa junto con su filial Iberia Express para el verano de 2015, que se suman a la recuperación de rutas que la matriz dejó de operar en 2013, y al incremento de frecuencias de otras conexiones.
En cuanto al empleo, fruto del plan de reestructuración ya aplicado, Iberia calcula que unos 3.800 trabajadores ya habrán salido de la compañía a finales de este año, el 70% del objetivo previsto.
La compañía prevé con el nuevo ERE, pactado en julio de este año, reducir su plantilla hasta un máximo 5.471 trabajadores dependiendo del número de empleados que se acojan voluntariamente a dicho expediente.
Con todo ello y con las medidas de productividad pactadas con los tres colectivos de pilotos, tripulantes, y personal de tierra, Iberia se ha marcado como objetivo reducir un 35% el ratio del coste por asiento ofertado y empleado de cara a 2020.