La Consejería de Movilidad y Transformación Digital de Castilla y León ha dado a conocer que durante el año 2022 se realizaron 28.592 actuaciones de control en el ámbito de transporte en la región y se detectaron un total de 17.180 infracciones.
Un 82% de ellas estaban relacionadas con los tiempos de conducción y descanso, según se ha anunciado en la Jornada de Coordinación y Especialización en Inspección de Transportes, organizada esta semana en Valladolid por la Junta y el Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Castilla y León.
Así mismo, este 2023, las labores de inspección se centran en el control de la prohibición de carga y descarga por parte de los conductores profesionales, de la morosidad y en el control del precio del transporte
Por otra parte, las autoridades castellanoleonesas prevén invertir 570.000 euros en un proyecto para la digitalización de las actuaciones ligadas a esta labor inspectora.
De igual manera, también se contempla la compra de básculas móviles electrónicas de pesaje, herramientas y material informático complementario para mejorar la eficiencia operativa, la seguridad y el cumplimiento de regulaciones, el suministro de ordenadores portátiles convertibles y llaves tacógrafo, además de la implantación de una aplicación para la tramitación y gestión de expedientes sancionadores.
Castilla y León cuenta con más de 14.000 empresas dedicadas al transporte por carretera y una flota de 42.604 vehículos. El segmento de mercancías de la región contabiliza 12.000 empresas y 35.951 vehículos.