En la sede de Astracán Fenadismer Canarias, se ha celebrado recientemente un encuentro entre representantes de Fenadismer y de la Asociación de Transportistas de Suecia, Sveriges Akeriforetang, para analizar la situación económica y de actividad en que se encuentran las empresas transportistas de ambos países, así como los retos principales a los que se enfrentan en los próximos años.
En relación con a la tipología de vehículos utilizados, frente al tipo de vehículo más utilizado en España para el transporte de mercancías, esto es, el vehículo articulado de 40 toneladas de MMA, que representa el 92% de las toneladas kilómetros transportadas en nuestro país, por contra en Suecia el vehículo habitual utilizado para el transporte de mercancías es el megacamión de 60 toneladas y 25,25 metros transportando más del 80% de la mercancía en dicho país.
Sin embargo, a fin de contribuir a la mejora y eficiencia del transporte y el respeto al medio ambiente y la seguridad vial, recientemente el gobierno sueco ha aprobado un nuevo tipo de megacamión de mayores dimensiones que, inicialmente con carácter experimental estará sujeto a autorización previa a su circulación.
El nuevo megacamión estará integrado por unconjunto de vehículos, con hasta un total de 12 ejes, 90 toneladas de MMA y 30 metros de longitud.
En lo que se refiere al transporte internacional, ambas organizaciones han manifestado su preocupación por la competencia desleal que las empresas transportistas estaban soportando por parte de las empresas deslocalizadas en países del Este de Europa, especialmente de Polonia, Bulgaria y Rumanía.
Así en el caso de Suecia, su flota sólo realiza un 8,2% de transporte internacional, frente al 43,2% que realiza la flota polaca.En España, aunque la cuota de transporte internacional es algo superior, en torno a un 30%, Fenadismer considera como "preocupante" que un 10% de las exportaciones e importaciones que se generan en el país sea realizado por la flota polaca, o que las empresas búlgaras hayan multiplicado por ocho su presencia en España en los últimos años o por tres en el caso de las empresas rumanas.
Ambas organizaciones han acordado colaborar conjuntamente en la defensa de los intereses de las pequeñas y medianas empresas de sus respectivos países ante las instituciones europeas, planteando la necesidad de promover con carácter inmediato medidas de protección para el sector del transporte por carretera.