Tras un estable último trimestre de 2022, la confianza empresarial en el transporte sigue a la baja de cara a los primeros tres meses de este 2023.
En este contexto, el Índice de Confianza Empresarial Armonizado del INE presenta, en el segmento del transporte y la hostelería, un retroceso de un 2,97% de cara al primer trimestre de este año con respecto al último cuarto de 2022.
El dato incide en el pesimismo a las puertas de un 2023 pleno de incertidumbres económicas, un empeoramiento de las previsiones de crecimiento y en el que también se cruzan diversas citas electorales.
Más en detalle, en el ámbito del transporte, un 12% de los gestores de empresas del sector considera que la marcha de su negocio será favorable en el período, mientras que un 32,9% opina que será desfavorable y el 55,1% restante considera que el trimestre tendrá un comportamiento acorde a sus perspectivas.
Por tanto, el saldo entre opiniones optimistas y pesimistas se coloca en un índice negativo de 20,9 puntos, frente a los 9,8 puntos también negativos de todos los sectores de actividad.
Un último trimestre de 2022 estable
Con respecto a la evolución del tramo que va de octubre a diciembre del año pasado, un 22,3% de los empresarios del sector transporte estima que se ha comportado de manera favorable. En sentido contrario, un 22,4% es pesimista sobre el comportamiento del tercer cuarto del ejercicio.
Así mismo, un 55,3% de los empresarios de transporte encuestados por el INE cree que el cuarto trimestre de 2022 se ha comportado de acuerdo a las expectativas que se tenían puestas en él.
Así pues, el saldo de opinión con respecto al trimestre finalizado se coloca en un saldo negativo de una décima porcentual, frente al 1,1 positivo de la media la totalidad de sectores económicos analizados por el INE.
