Rusia ha sido durante mucho tiempo un país en el que predominaba el ferrocarril, sin embargo desde hace unos años el transporte por carretera ha sustituido al ferroviario. En las carreteras del país más grande del mundo, el número de viajes de camiones está aumentando y por ende los volúmenes de carga.
Esta tendencia cada vez se refleja más en la creciente demanda de semirremolques Schmitz Cargobull en Europa del Este, de hecho las ventas del grupo en Rusia aumentaron considerablemente el pasado ejercicio entregando más de 5.000 unidades. Por ese motivo, a partir de noviembre de este año, la compañía realizará las operaciones de fabricación en San Petersburgo.
En junio de este año, se habrá completado la construcción de la fábrica que se encuentra en el suroeste de la ciudad rusa, en las inmediaciones de la autopista M11 y de la vía que conduce a la autopista de circunvalación. Las previsiones señalan que el volumen de ventas inicial será de 900 unidades que incluye semirremolques de caja de lona, semirremolques basculantes, camiones rígidos con cuerpos de caja, de eje central vehículos del cuerpo de caja y camiones rígidos con volquetes. Está previsto que la capacidad de volumen de ventas aumente sustancialmente a más de 5.000 para el 2018.
Las ventajas de la fábrica de productos múltiples son obvias, la proximidad al mercado y los canales de comunicación que permiten respuestas más eficientes y más rápidas para las demandas del sector del transporte de Rusia. Además, la compañía espera alcanzar una alta calidad del producto, al realizar el montaje final en su propia fábrica.