La nueva instalación seguirá siendo su principal 'hub' a nivel europeo.
Scania invertirá 1.500 millones de coronas suecas (150,81 millones de euros) en una nueva planta en la ciudad sueca de Södertälje, con el fin de triplicar su capacidad de producción y reducir a la mitad el consumo energético respecto a sus instalaciones actuales mediante el uso de energías renovables.
Las nuevas instalaciones supondrán un gran avance para el fabricante en la transición hacia combustibles más eficientes, principalmente para el transporte de larga distancia. Aunque se han barajado otras opciones, la construcción de una nueva planta es la solución más rentable y medioambientalmente sostenible.
Además, el centro de investigación y desarrollo del grupo se encuentra en la misma localidad, que seguirá siendo su principal 'hub' a nivel europeo. Con el nuevo centro, la energía utilizada por tonelada producida se reducirá un 50%, principalmente debido a las mejoras en el proceso de fundición y la recuperación del calor generado.
También se reciclará hasta el 70% de la arena utilizada en los moldes de fundición, que debe ser transportada en camión. Por tanto, con la introducción de nuevos métodos de gestión y reciclaje de los materiales, disminuirán las necesidades de transporte en relación al número de unidades producidas.
Por otro lado, la instalación permitirá disminuir las emisiones y el ruido de las operaciones y de los servicios de transporte. La planta actual del fabricante fue construida en 1914 en una zona industrial cercana al centro de Södertälje, mientras que la nueva se levantará en un área periférica.
Está previsto que la evaluación medioambiental del proyecto finalice en la primavera de 2018, con lo que la construcción, tras los trámites necesarios, podría iniciarse en enero de 2019.