Renfe ha completado esta semana la operación de adquisición del 50% del operador checo Leo Express, tras la ampliación de capital social de la compañía.
Como consecuencia del proceso de liberalización del transporte ferroviario de viajeros, Renfe se ha marcado como objetivo en su plan estratégico impulsar la internacionalización de la compañía.
En este sentido, la adquisición del 50% del capital de Leo Express constituye una oportunidad de negocio estratégica para Renfe, ya que le permite tener actividad en tres países europeos más (República Checa, Eslovaquia y Polonia) y disponer de los recursos y licencias para acceder al mercado alemán.
Asímismo, la empresa pública española estima que el movimiento le permite optar a licitaciones de servicios ferroviarios en Alemania, República Checa, Eslovaquia y Polonia, con capacidad de implantación local, experiencia, equipo, o referencias en esos países, muchas veces imprescindibles para poder concursar.
De igual modo, los directivos del operador considera que, además, la implantación de Renfe en el centro y este de Europa podría tener un efecto arrastre, facilitando el crecimiento de la actividad internacional de otras empresas españolas, especialmente relacionadas con la industria ferroviaria.
Por otra parte, la operación también implica que hayan pasado a formar parte del consejo de administración del operador checo Manel Villalante, director general de Desarrollo y Estrategia de Renfe, Sonia Araujo, directora general de Renfe Viajeros, y Teresa Torres, directora general Económica-Financiera de Renfe.