Prosegur ha estrenado un proyecto integral de iluminación en su principal base operativa de España, ubicada en el madrileño barrio de Vicálvaro. Así, se ha sustituido la iluminación anterior por lámparas LED y se han instalado paneles solares fotovoltaicos para cubrir parte del consumo con energía autogenerada.
Con este proyecto, el edificio asciende dos niveles en su categoría energética y ha pasado de la categoría D a la B. En concreto, el proyecto de iluminación permite a la compañía de seguridad reducir su consumo en un 58% respecto a la instalación anterior, evitando la emisión de más de 129 toneladas de CO2 al año.
Además, la instalación de paneles fotovoltaicos reduce el consumo estimado en un 14%, y evita la emisión de más de 62 toneladas de CO2 cada ejercicio.De este modo, se logra una importante disminución de las emisiones de CO2 y se reduce la demanda energética, en línea con el compromiso de la compañía con la gestión responsable y el medio ambiente.
El proyecto de Vicálvaro servirá como experiencia para replicar la iluminación LED y diferentes medidas de eficiencia energética en 10 edificios corporativos en España y Portugal. En la siguiente fase, Prosegur implantará sistemas tecnológicos de gestión energética en sus principales ubicaciones para controlar las pautas de consumo mediante telemedición, sensores y análisis de datos, para reducirlas hasta un 10%.
La empresa de seguridad también se ha comprometido a completar su plena descarbonización diez años antes del plazo fijado en el Acuerdo de París, es decir, en 2040.
Su Plan Director de Sostenibilidad 2021-2023 , centrado en el uso de fuentes renovables y la mejora continua de la eficiencia energética, recoge 63 iniciativas con una serie de indicadores que permitirán medir su impacto y evolución.