Las instalaciones de Boluda Maritime Terminals en el puerto de Santa Cruz de Tenerife han acogido esta semana la primera escala del 'Gran Amberes', primera nave de la clase G5 del Grupo Grimaldi, procedente de Casablanca y que ha recogido carga contenerizada de trasbordo con destino en el puerto de Cotonou.
Este buque, que navega bajo pabellón italiano, cuenta con 38 metros de manga y 250 metros de eslora. Así mismo, puede transportar 4.700 metros lineales de carga rodada, 2.500 automóviles y 2.000 TEUs.
De igual manera, la embarcación está diseñada para conectarse a las tomas eléctricas mientras permanece atracado, con lo que Grimaldi prevé una reducción de sus emisiones en un 43% con respecto a modelos anteriores.
Precisamente en este mismo ámbito de la electrificación, el puerto de Tenerife ya tiene el proyecto para suministro de electricidad a portacontenedores en las terminales del dique del Este redactado y con la vista puesta en que previsiblemente salga a concurso a finales de este año, con una inversión de doce millones de euros.
Grimaldi ha venido incrementado desde 2019 sus escalas de tránsito internacional en el puerto tinerfeño y el volumen de mercancías movidas, de tal manera que el grupo transalpino ha pasado de las 120.321 toneladas de 2019 a 268.612 toneladas en 2022.
La naviera enlaza África, Europa y América a través del puerto tinerfeño, enclave que conecta instalaciones portuarias como los puertos de Lagos y Freetown, en Nigeria y Sierra Leona, con los de Lisboa en Portugal, así como con los de Río de Janeiro y Vitoria, en Brasil
