El TJUE da la razón a la Comisión Europea en el último procedimiento abierto contra Portugal.
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea considera que Portugal ha incumplido la Directiva 2006/126/CE, sobre el permiso de conducción, al no configurar la conexión a la red europea del permiso de conducción (Resper).
Según señalan desde la Comisión Europea, Resper puede ayudar a los Estados miembros a cooperar entre sí y a garantizar que los permisos se expiden de conformidad con las disposiciones de la UE.
El intercambio de información a través de Resper debía comenzar el 19 de enero de 2013. Sin embargo, y a pesar del dictamen motivado que el organismo europeo remitió a Portugal en febrero de 2015, tras varias interpelaciones en años anteriores, este país no ha cumplido aún con la normativa comunitaria.
La administración portuguesa sostiene que los problemas a los que se todavía se enfrenta, una reestructuración interna de los servicios de su administración central y dificultades financieras, son las causas del retraso en la transposición de la Directiva 2006/126.
Respecto a esta defensa, el Tribunal ha respondido que un Estado miembro no puede alegar disposiciones, prácticas o las circunstancias internas para justificar el incumplimiento de las obligaciones y plazos del Derecho de la Unión.