La población y las economías portuguesa y española han alcanzado un tamaño similar al de Italia. Sin embargo, tanto su integración mutua como con el resto de Europa deben vencer todavía múltiples barreras.
En este contexto, la Fundación Corell celebrará el 6 de octubre una jornada en la que propondrá analizar en profundidad la mejora de la conectividad terrestre entre la península ibérica y el resto de Europa a través del Pirineo Central.
El evento, que se desarrolla en colaboración con la Universidad de Zaragoza y el Consejo Aragonés de Cámaras, tendrá lugar en dos sesiones, de mañana y tarde, en formato presencial y 'on-line'.
A lo largo del día, se explicará que la digitalización de la economía demanda la existencia de una infraestructura de comunicaciones más potente, pues por ejemplo en Italia, existen 16 pasos de carretera con sus países vecinos, cuatro de ellos de muy alta capacidad, y dos conexiones ferroviarias exclusivas.
En el caso de la Península Ibérica, con población y actividad económica parejas, solamente hay dos pasos: Irún y la Junquera. Además, la carretera y el ferrocarril compitiendo por el mismo espacio físico y existen graves problemas de saturación en determinadas épocas del año.
Por ello, se hace necesaria la creación de un verdadero espacio energético ibérico, conectado a su vez con el europeo, que permitiría aprovechar al máximo las infraestructuras actuales y reducir costes y precios finales.