El Ayuntamiento de Ribas de Sil, en Lugo, y el de La Lama, en Pontevedra, han renovado recientemente sus flotas de recogida de residuos con nuevos camiones Iveco y Volvo que cuentan con transmisiones automáticas de Allison.
En el municipio lucense, se ha incorporado un Iveco Eurocargo ML120E25/P con compactadora HV Veicar con una capacidad de 8 m³ y transmisión Allison de la serie 3000. En este caso, buscaban una solución robusta que permitiese maniobrar con agilidad por las carreteras de la zona y los cruces de dimensiones reducidas.
Mientras, el consistorio de La Lama ha apostado por un Volvo FL 42R de unos 250 CV, que incorpora una compactadora HV Veicar de 12 m³ de capacidad y la misma transmisión, pero con retardador integrado, un elemento esencial dada la geografía de la zona y la dispersión de la población.
Las cajas de cambios automáticas que utilizan estos vehículos cumplen con la normativa europea vigente y cuentan con una mecánica sencilla que permite al usuario, en caso de avería, solucionarla de manera fácil y rápida, reduciendo significativamente los tiempos de inactividad.
Desde hace algo más de 10 años, el sector ha cambiado las cajas manuales o manuales automatizadas por transmisiones automáticas, que copan un porcentaje muy elevado del mercado. En el caso de las de Allison, permiten una conducción muy suave y dinámica, por lo que el trabajo se hace menos pesado para el personal de recogida de residuos.
También contribuyen a reducir los costes de mantenimiento y optimizan los tiempos de recogida, debido a la rápida aceleración que ofrece la tecnología 'Continue Power'. A ello se suma la resistencia de estas cajas automáticas en las condiciones más duras, lo que asegura la continuidad de un servicio esencial, pero con un menor gasto de explotación.