Maersk empezará a ofrecer a finales de octubre, tras haber ensayado el servicio a lo largo del pasado mes de septiembre, un nuevo enlace intermodal para el transporte de mercancía refrigerada entre España y el Reino Unido, a través de su filial Sealand.
La iniciativa, diseñada especialmente para el movimiento de perecederos, contará con tres salidas semanales desde Valencia hacia la terminal londinense de Barking, al este de la capital inglesa, con capacidad flexible.
De igual modo, el grupo danés estima que los servicios de vuelta desde Gran Bretaña transportarán mercancía seca no refrigerada.
La naviera ha ido apurando plazos para tener listo el servicio de cara a la inminente temporada alta en las exportaciones de frutas y verduras. Así mismo, también espera abrir la iniciativa a nuevos destinos, con el fin de impulsar la competitividad en estos trayectos, al tiempo que se reducen las emisiones contaminantes.
El objetivo del grupo es hacerse con una parte de importante flujo de frutas y verduras que se dirige desde el arco mediterráneo hacia los principales mercados del Viejo Continente, como Alemania, en el Benelux o los países escandinavos, además del Reino Unido y que implica un volumen diario de unos 1.400 camiones que cruzan la frontera norte española de camino hacia Europa, según sus cálculos.