El Comité de Protección Marítima de la Organización Marítima Internacional, OMI, se ha reunido vía 'on-line' en el mes de mayo para debatir, entre otros asuntos, sobre las nuevas medidas para evitar la pérdida de contenedores en el mar.
Este problema tan común en la actualidad representa un peligro potencial para la seguridad marítima y supone una amenaza para el medio ambiente, en especial en lo referente a los plásticos que contienen.
Entre los últimos tres meses de 2020 y principios de este año, se han perdido casi 3.500 contenedores en numerosos incidentes ocurridos en el Pacífico. La cifra está muy por encima de lo habitual para las mismas fechas y está generando preocupación acerca de las causas que hay detrás de lo sucedido.
En la mayoría de los casos, los contenedores se pierden debido a temporales o grandes oleajes que causan inestabilidad a bordo. El problema es que es difícil obtener datos precisos sobre el número de unidades perdidas, pues a veces no se puede determinar de manera inmediata cuántos han caído y dónde se ha producido la pérdida.
Son hechos que generalmente se producen en condiciones climatológicas adversas, por lo que no es posible llevar a cabo una investigación en el lugar de los hechos. Además, para la tripulación resulta muy peligroso desplazarse entre los contenedores en estas delicadas situaciones.
Medidas de la OMI
Por ello, el Comité de Protección Marítima ha acordado tomar medidas para detectar e informar sobre los contenedores perdidos, mejorando así su posicionamiento, trazabilidad y recuperación.
Así, se establecerá un sistema obligatorio para declarar las pérdidas y se habilitarán medios a bordo para poder identificar fácilmente el número exacto de unidades perdidas.
Asimismo, los buques estarán obligados a informar sobre la pérdida de contenedores a través de un procedimiento estandarizado, proporcionando detalles sobre la identificación de las unidades, la mercancía transportada, especialmente si es mercancía peligrosa, o si los contenedores pueden flotar y constituyen un riesgo de colisión con otras embarcaciones.
Durante los próximos dos años, la OMI se esforzará para reducir las pérdidas de contenedores y restaurar la confianza en la seguridad del transporte marítimo.