El 63% de los transportistas españoles optaría por vehículos diésel, mientras que solo un 11% se inclinaría por híbridos y un 4% elegiría vehículos eléctricos.
Esta es una de los principales conclusiones que se destaca de un estudio llevado a cabo por Continental y Fenadismer, elaborado con el fin de conocer la percepción de estos profesionales en lo que se refiere a seguridad, tecnología y sostenibilidad, y del que también se extrae que la relación calidad-precio emerge como un factor primordial en las decisiones de compra.
La sostenibilidad se posiciona asimismo como un elemento cada vez más importante, con un 49% de los encuestados considerando que debe ser una prioridad destacada.
Así, un 16% muestra gran preocupación por el impacto medioambiental de su actividad, y el 36% se muestra moderadamente preocupado, mientras que un 17% de los transportistas confiesa no estar al tanto de las normativas ambientales impulsadas por gobiernos para reducir emisiones.
La encuesta también revela que el 38% de los transportistas considera fundamental reducir emisiones, y un 37% aboga por evolucionar hacia nuevas opciones de combustible, si bien, como se adelantaba, un 60% seguiría adquiriendo vehículos diésel, a pesar de la creciente conciencia medioambiental.
En este sentido, la colaboración público-privada es señalada por un 25% como crucial para mejorar la sostenibilidad en el sector.
En lo que respecta a la seguridad vial y el rendimiento del vehículo, se subraya la importancia de los neumáticos como el único punto de contacto constante con el asfalto, resultando en un 60% de transportistas a favor de establecer la imposición de una profundidad mínima para estos elementos en los camiones.
Sobre innovación, se abordan las últimas actualizaciones del Paquete de Movilidad de la Unión Europea indicando la obligatoriedad de tacógrafos inteligentes de segunda generación en vehículos que operen en territorio europeo a partir de enero de 2025.
Aquí, solo el 20% afirma tener flotas preparadas, y el 45% señala el alto costo como impedimento. También se refleja falta de conocimiento sobre los beneficios del cambio anticipado, con el 70% admitiendo desconocimiento.
Por ello, en las conclusiones se ha subrayado la necesidad de concienciación sobre las ventajas de la actualización de herramientas digitales, como los mencionados tacógrafos de segunda generación, mientras que en el tema de la descarbonización del sector se ha pedido un enfoque realista en la renovación de flotas y una política basada en la neutralidad energética.
