Por primera vez en años, el número de portacontenedores vendidos para su demolición en la primera mitad de 2022 ha caído hasta cero y las cifras relativas al reciclaje continúan en mínimos históricos.
Los elevados precios en el mercado de fletes y el aumento de las tasas de carga han llevado tanto a las navieras como a los propietarios de buques no operadores a seguir aprovechando sus embarcaciones más viejas y mantenerse alejados del reciclaje a pesar de los atractivos precios de demolición.
En este sentido, pueden lograr ganancias extraordinariascomerciando con sus barcos, particularmente los más antiguos, puesto que ya están libres de deuda.
Los alarmantes datos de 2022 en este área se suman a unas cifras de reciclaje particularmente bajas en 2021, cuando solo 19 buques con una capacidad total de 16.500 TEUs fueron enviados al desguace. Esto contrasta con los 194.500 TEUs de 2020, los 417.000 TEUs de 2017 y los 655.000 TEUs de 2016.
La consultora Alphaliner cree que las cifras de demolición de portacontenedores serán moderadas en la segunda mitad de 2022. A pesar de la estimación inicial de 30.000 TEUs anuales, probablemente sean sustancialmente menores, posiblemente por debajo de los 16.500 TEUs de 2021.
Las tarifas de desguace, que han oscilado entre los 600 y 700 dólares por tonelada en el subcontinente indio y entre 300 y 450 en Turquía, están a un nivel elevado, pero no lo suficiente como para convencer a los propietarios.
Además, los armadores seguirán evitándolo en los próximos meses si continúa la escasez de tonelaje en el mercado, situación que podría extenderse hasta finales de 2022 o principios 2023, y les está reportando grandes ganancias.
El futuro del reciclaje de buques
Sin embargo, los riesgos de exceso de capacidad reaparecerán en 2023, pues se espera que lleguen al mercado 2,3 millones de TEUs de nueva capacidad. El impacto para propietarios y transportistas podría comenzar a sentirse más a partir de la segunda mitad del año, provocando un repunte en las ventas para demolición, que podrían llegar a 250.000 TEUs.
Se espera que la cifra aumente aún más en 2024, ya que llegarán al mercado otros2,8 millones de TEUs de nueva capacidad, con lo que 350,000 TEUs correspondientes a contenedores más antiguos podrían entonces ser enviados al desguace.
En cualquier caso, estas cifras pueden resultar conservadoras, ya que la presión del exceso de capacidad y el impactodel nuevo reglamento IMO 2023 para los buques menos eficientes puede llevar a una parte significativa de la flota actual, particularmente las unidades de 20-25 años de edad, que son 806 en total, y las mayores, a convertirse en serios candidatos para el desguace en los próximos dos años.